30.9.05

no encuentro

Llevo casi un año con este blog y aún no encuentro el tono para esto. ¿Por qué? ¿Es por la espontaneidad? ¿Por la pretensión de espontaneidad? ¿Porque no puedo ser coherente, y la incoherencia me obliga a disgregarme en miles de voces? ¿Porque soy incapaz de extirpar a mis yoes menos atractivos, a la graciosilla, a la cursi, a la crítica de revista de colegio de primaria, a la que siempre anda descubriendo américas?

Y si encuentro el tono, el bloque, ¿será posible mantenerlo? ¿Es aconsejable mantenerlo, eliminar progresivamente las fallas?

Castrar. Sólo así sale la voz pura.

¿Por qué los diarios literarios apenas hablan de sexo?
¿Castrati?


14.9.05

navegar

por internet se parece más a pasear, uno comienza en sus sitios favoritos y se va adentrando al azar por los recovecos adonde le llevan los links, y descubre infinidad de cosas que jamás hubiera esperado encontrar. Hoy visité a Álvaro Valverde (su dirección está fija en mi blogroll) como casi todos los días en que publica algo nuevo y leí su agradecimiento a arquilecturas . Paseando, paseando, topo con esta página fascinante y sumamente útil para todos.

¿Es usted aspirante a cátedra y no sabe cómo justificar su elección? ¿Profesor titular de una universidad de reciente creación invitado a un simposio internacional? ¿Siempre ha sacado matrícula de honor gracias a sus dotes mnemotécnicas y no sabe qué hacer para impresionar a su directora de tesis? Deje de perder tiempo y dinero buscando una teoría original e intentando hacer que sus disertaciones sean las más incomprensibles del campus. ¡¡¡Por fin ha llegado el único, el inimitable, el auténtico...!!!

postmodernist generator


13.9.05

otro pecado solitario

y olvidado ya era repasar con un dedo los lomos de las estanterías, generalmente comenzando en la Z, sin demasiada prisa, demorándonos en algún título más extraño, o alguna encuadernación de tacto especialmente agradable que encerraba un papel suave y firme por donde deslizar toda la palma de la mano antes de leer furtivamente algún verso.
Ayer visité una biblioteca. Tuve un libro en las manos. Me temblaba el estómago.


12.9.05

desayuno y periódico

o casi, porque ni he desayunado (antes tengo que salir a correr por recomendación del geriatra) ni compro periódicos desde que descubrí en mis propias carnes que todo se escribe con los faxes gobierno informa. Como animala omnívora, de vez en cuando leo el boletín, ejem, confidencial de Periodista Digital y hoy me topo con un libro secuestrado. ¿Será un libelo contra la Monarquía? ¿Contra el Presidente de Gobierno? ¿Un nuevo tratado del imán de Fuengirola?
Pues no. En las post-democracias hi-tech la censura no es ideológica.

Cuando se levantó el secuestro cautelar, O.T. ya no estaba allí.

11.9.05

sólo una frase

para dejar constancia (las huellas fechadas de Lejeune) de que existo, de que aún estoy aquí, aunque me coman otra vez los malos hábitos cuando casi había conseguido disciplinarme.

Dios mío, bendíceme con el don de la rutina.

5.9.05

el domingo

por la mañana oí a riezu entrar en casa arrastrando algo pesado. "Ya está, el cadáver troceado", pensé por contarme un chiste fácil y seguir durmiendo. Cuando coincidimos al mediodía, me dijo que había traído otra de sus legendarias adquisiciones de contenedor. Había dos alfombras redondas, bandejas de plástico azul, metros de pintor o carpintero, un bolso de rayas y un poncho blanco, sobres blancos sin usar y varios expedientes de una gestoría. Encontré la historia.

Ella se fue hace tiempo y olvidó algo de ropa, algo de trabajo atrasado, y no volvió a por nada: No era necesario. Siempre se puede comprar más ropa, buscar un trabajo mejor o al menos distinto. A él no le molestaban sus cosas. No era nostalgia ni esperanza ñoña. La ropa estaba al final de un altillo, y los muebles sólo son muebles y los compraron la primera vez que fueron juntos a ikea, que es cuando uno inaugura formalmente una pareja. Eran tan suyos como de ella y además ahora estaría comprando bandejas nuevas en cualquier ikea de España con cualquier otro. O sola. Aunque las mujeres solas no suelen van a ikea, les trae malos recuerdos.
Hasta que llega ella (otra ella). Y de repente le parece que esos muebles son de ella, que los olvidó a propósito para marcar su propiedad y él, que siempre fue tan tonto con ella, no se había dado cuenta hasta entonces, porque debería haberlos reocgido hace tanto y no ha vuelto a dar señales de vida. Antes de ella (otra ella) escriba su nombre en el buzón junto al suyo, lo tira todo. Ahora le parecen una broma, un insulto.


Otra historia en la basura. En cuanto volví a ver a riezu le conté mi historia, lo que realmente había pasado.

"Estaba todo desperdigado y yo lo he ido recogiendo, nada más. Ni siquiera son del mismo contenedor".

Mi historia, al fin y al cabo, estaba hecha por casualidad. Como todas.

3.9.05

el maravilloso mundo de la selección de personal

acaba de llamar a mi puerta de nuevo, después de un año de cvombardeos de baja intensidad. Esta vez la entrevista fue del tipo yo-te-pincho-para-que-tú-saltes. Bastante divertida. Adjunto traducción resúmen. Evidentemente, esto no es la transcripción literal, sólo el sentido último. En las entrevistas todo funciona como una balsa de aceite. O de vaselina.

- Vamos a ver, ¿qué coño hace una pringada como tú aquí? ¿Fregar baños?
- Oye encanto, que yo esto lo sé hacer de sobra y mejor pagado. ¿Quién te crees que eres por entretener jubilados con cursitos de culturilla?
- Mira, que me das igual, que total, si acaso, vas a hacer una sustitución que no te va a dar ni para rimmel, lela.
- Avísame si te la vas a meter por el culo tu oferta de trabajo. Es para aplaudirte.*


Después me fui a ahogar mis penas en lencería fina.